Por Paula de Castro,  directora comercial Services and Assistance de AXA Partners

Desde que Henry Ford comenzara con la fabricación de autos en cadena ha habido cambios, por supuesto, pero el sector de la automoción ha utilizado durante muchos años los mismos métodos de producción, y la era digital ha llegado para romper con esto, y traernos un modelo más sostenible.

Si bien la tecnología se mantendrá como base, poco a poco nos alejamos de los procesos tradicionales para acercarnos a coches inteligentes y autónomos, centrados en el cliente y personalizados según sus gustos. 

La digitalización nos llevará a la personalización del producto y a la elaboración prácticamente a la medida de cada cliente de su propio coche. Los clientes cada vez son más exigentes y buscan unas mayores prestaciones en su vehículo a la vez que, conscientes del entorno que les rodea y de las futuras exigencias de los gobiernos y de la sociedad en su conjunto, buscan una reducción en la contaminación, lo que lleva al desarrollo de coches eléctricos, o híbridos además de autónomos.

Pero, aunque todo esto sea una realidad, su aplicación masiva queda en el futuro. Actualmente las posibilidades de digitalización de los distintos vehículos nos las ofrecen distintas marcas que se han unido entre sí para ofrecer características concretas, Honda e Hitachi se han aliado para crear un motor eléctrico, Seat se alió con Samsung, alianza a la que posteriormente se unió SAP para avanzar hacia el siguiente nivel del coche conectado. Alianzas hacia una movilidad sostenible, segura y más limpia.

Pero ¿Qué nos cabe esperar de ese coche del futuro?

Ya damos por hecho la mayor comodidad y adaptabilidad al usuario y la mayor protección en  todo momento, además de un control del tráfico integrado que nos ayude en una selección automática de la mejor ruta para evitar atascos y accidentes. Todo esto sumado a que sea el propio vehículo el que avise cuando necesite cualquier tipo de revisión, anticipándose y reduciendo la gravedad de las averías o anomalías, y esté monitorizado todo el mantenimiento. Y por supuesto una conectividad al 100%.

Pero ¿qué más esperamos a parte de estas características que ya forman parte de los vehículos nuevos? Actualmente los coches respetuosos con el medio ambiente que se fabrican son prácticamente todos de gama alta, y no están al alcance de todos los bolsillos, pero sí se exige una transición energética y que los vehículos de combustión dejen de circular a partir de 2050, debemos esperar que las grandes firmas automovilísticas inviertan ya en producir nuevos modelos de coches eléctricos a un precio más accesible y una mayor variedad de estilos de vehículos, con los que llenar el mercado.

Además, estos vehículos irán mejorando su autonomía con el tiempo, aumentando la distancia que podrán recorrer sin recurrir a la recarga, y en caso de necesitarla y no tener un punto cerca (actualmente en España estamos según datos de la Anfac, entre los últimos de Europa en infraestructura de recarga de acceso público, AXA Partners cuenta con vehículos de servicios de recarga In situ y servicios de instalación y mantenimiento de puntos de recarga. 

Y ¿qué pasa con toda esta información?

La gran cantidad de información generada por la conectividad beneficiará tanto a empresas como a usuarios ya que permitirá un conocimiento más profundo del cliente y por tanto la creación de productos y servicios adaptados a sus necesidades. 

En un futuro cercano todos los autos serán eléctricos, contarán con tecnología más sofisticada para un primer autodiagnóstico y avisarán a la compañía de asistencia de manera autónoma y proactiva, y la geolocalización seguirá facilitando su localización para brindarle la asistencia en el menor tiempo posible, con la mejor valoración personal. Sin embargo, siempre seguirá siendo necesaria una valoración personal experta además de la asistencia a los conductores, y se valorará aún más el trato personal y cercano, como el garantizado por compañías como AXA Partners. 

Las compañías de asistencia seguimos observando las tendencias para adaptarnos y adelantarnos con proyectos que aúnan tecnología y know how especialista como es la herramienta “Asistencia Fácil Auto” ofrecida por AXA Partners, una plataforma digital a través de la cual los clientes finales pueden gestionar sus propias solicitudes de asistencia en carretera. Sin olvidar la inclusión de canales o tecnologías como whatsapp, chatbots, asignación automática, entre otros, que mejoran la eficiencia operativa y por tanto la satisfacción del cliente final, que es nuestra meta sea cual sea el canal o modo de contacto, en definitiva, cuidar de lo que importa, cuando importa.