14 particulares afectados por la presunta estafa de la correduría Herrero Brigantina, llegados a Ponferrada desde distintos puntos de Galicia y Asturias, han decidido iniciar un encierro, en principio indefinido, en los locales de la sede de la empresa en Ponferrada, ubicada en la calle Hamburgo, según ha difundido la Cadena Ser.

«Tendrá que sacarme la policía», dice uno de los clientes a los que la firma, investigada ya por el juez de la Audiencia Nacional Santiago Pedraz, le ofreció productos de inversión con una buena rentabilidad y sin aparente riesgo y cuyo dinero ahora no aparece.

«Me dijeron que podía sacar los más de 100.000 euros que invertí el primer mes y llevo desde el verano intentando recuperar el dinero y no aparece por ningún lado», dice Iván, que ha llegado desde Asturias para exigir que se le devuelvan «todos mis ahorros».

La cadena informa que su protesta podría ser el principio de una serie de acciones, por lo que la OCU ya ha recomendado que los afectados recopilen toda la información sobre sus inversiones para poder reclamar adecuadamente.

Según la información aportada por la Audiencia Nacional, esta presunta estafa piramidal se han visto implicados alrededor de 35.000 clientes de toda Europa mientras que al presidente de la correduría Juan González Herreno no se le ha podido emplazar para tomarle declaración.

La DGSFP ya ha revocado la autorización para operar en seguros a la correduría Herrero Brigantina y a 6 filiales del grupo.