El RACC presenta los resultados del estudio de Green NCAP de 2022
El RACC ha presentado los resultados de Green NCAP en 2022 con la evaluación de 34 nuevos vehículos, entre los que hay modelos con diferentes tipos de propulsión (eléctrico de batería, híbridos, gasolina o diésel), y el Ford Puma, que funciona con un combustible alternativo.
El test mide la eficiencia energética y las emisiones de los automóviles en condiciones reales de circulación y los puntúa en una escala de 0 a 5 estrellas. Este análisis destaca el Dacia Spring como mejor automóvil del año por su bajo impacto sobre el medio ambiente, de entre todos los analizados.
La excelente eficiencia energética del Dacia Spring hizo que Green NCAP le otorgara la máxima puntuación de 5 estrellas, llegando a una valoración numérica perfecta en los apartados de emisiones sobre la calidad del aire y emisiones de efecto invernadero. En cuanto a la eficiencia energética, se queda a dos decimales de la excelencia (9,8/10), por su potencia de sólo 33kW.
Otros modelos como el Tesla Modelo 3, el NIO eT7 o el Cupra Born también recibieron una buena puntuación en 2022, sin alcanzar los bajos niveles de consumo que presenta el Dacia Spring.
Primeros resultados del 2023
Green NCAP también ha adelantado los primeros resultados de 2023, referentes a la evaluación de 4 nuevos modelos: el Kia Picanto, el Opel/Vauxha II Mokka, el BMW 2 y el VW Touran.
De los hasta ahora evaluados, el Kia Picanto, con motor de gasolina, ha obtenido una puntuación de 3 estrellas, mostrando un buen rendimiento de consumo de combustible, aunque presenta margen de mejora con respecto al índice de efecto invernadero. Con la misma puntuación, el Opel/Vauxhall Mokka demuestra un buen control de emisiones de partículas con su motor diésel. Aunque obtiene unos valores de consumo bajos, los gases de efecto invernadero que emite son los esperados en un vehículo de este tipo, y esto limita el resultado global.
El BMW2 Series Active Tourer, con un motor de gasolina, ha recibido 2 estrellas y media, una puntuación marcada por un bajo índice de eficiencia energética, aunque los valores de consumo son, en general, buenos.
Finalmente, el Volkswagen Touran, con una puntuación de 2 estrellas, está equipado con un motor de gasolina que presenta recorrido en la mejora del control de partículas y amoníaco, y eso le resta puntos en el índice de aire limpio. Además, también suspende en el índice de gases de efecto invernadero.
Análisis al ciclo de vida completo de los vehículos
Desde diciembre de 2022, Green NCAP ha ampliado su metodología de análisis, incorporando la nueva herramienta interactiva Life Cycle Assessment (LCA), que mide el impacto real de los vehículos sobre el medio ambiente durante todo su ciclo de vida. Los resultados se basan en la comparación de diferentes vehículos teniendo en cuenta el país, el uso y la sostenibilidad.
La conclusión más destacada en este sentido es la tendencia a fabricar cada vez más coches grandes y pesados, lo que incrementa sustancialmente el impacto negativo sobre el clima y la demanda energética y, además, afecta negativamente en la producción de vehículos y baterías. Una tendencia que viene apoyada por las preferencias de los consumidores, que muestran un claro interés por adquirir este tipo de vehículos más grandes, como los SUV (que combinan elementos de los todoterreno y los turismos convencionales).
Entrando más en detalle, el test revela la influencia significativa de la masa en relación a las emisiones de gases de efecto invernadero y la demanda de energía primaria. Aunque en algunos casos esta correlación podría estar distorsionada por peculiaridades en el diseño aerodinámico, en general, cuanto más pesa el vehículo, más afecta al medio ambiente y a la energía necesaria para utilizar el coche, independientemente del tipo de combustible.
Esta plataforma interactiva también va dirigida a los consumidores para que puedan hacer uso de ella a través de su portal web. De esta manera, contribuye a la concienciación medioambiental.
Green NCAP, por un medio ambiente más limpio
El RACC, a través de Green NCAP, evalúa periódicamente diferentes modelos de automóviles para determinar sus emisiones y la eficiencia energética, examinando su rendimiento en condiciones reales de circulación y con pruebas más estrictas que las exigidas legalmente a los fabricantes. La finalidad de Green NCAP es promover la fabricación de vehículos menos contaminantes, más eficientes y que supongan un mayor ahorro de combustible. Para conseguirlo, proporciona información independiente y rigurosa a los usuarios e incentiva a los fabricantes para que desarrollen automóviles más sostenibles. Para realizar estos últimos test, además, el método de evaluación de las emisiones se ha actualizado con un enfoque más amplio de la emisión de gases de efecto invernadero.