El margen de beneficio se estrechará en 2022 por la mayor siniestralidad y los menores ingresos financieros
Andrés Romero, consejero director general de Santalucía y presidente de ICEA, ha sido el encargado de abrir su tradicional Jornada de Perspectivas, tras la presentación de resultados del sector asegurador en 2021. Así, atendiendo a las cifras presentadas por el seguro en 2021, Romero ha señalado que “la incertidumbre es un rasgo evidente de nuestra realidad como sector”. Por ello, ha catalogado el ejercicio pasado como “el año que quiso ser y no fue”, doce meses cargados de “incertidumbres, sucesos e inquietudes”.
En relación con el sector asegurador, Andrés Romero ha señalado que “no ha sido un ejercicio fácil. Sabemos que el sector ha crecido, pero que todavía estamos lejos de las cifras de 2019”. Aunque, “hay que decir también que en unos años tan difíciles nuestro sector ha estado en todo momento ahí, ha hecho lo que tenía que hacer y ha cumplido con lo que tenía que cumplir. Este año el seguro ha sido más seguro que nunca, más servicio que nunca y más solidario que nunca”.
Sin embargo, ha añadido que “las condiciones del mercado siguen sin ayudar, principalmente en el negocio de Vida Ahorro, donde el entorno de tipos de interés bajos persistentes y la retirada progresiva de los estímulos al ahorro privado, continúan siendo un impedimento al necesario desarrollo del ahorro previsional, complementario al sistema público de pensiones”. Asimismo, ha comentado que “nos enfrentamos, cada año, a fenómenos climáticos extraordinarios que se han convertido en ordinarios. Precisamente por eso creemos que es necesario revisar, actualizar y ajustar a esta nueva realidad el papel del Consorcio de Compensación de Seguros”.
El presidente de ICEA también ha puesto de relieve “la misión clave que el seguro desempeña en el impulso de la economía sostenible, tanto por su papel en la prevención y protección de riesgos medioambientales, sanitarios o sociales; como inversores institucionales que demandamos productos financieramente sostenibles; y finalmente como oferentes de productos ESG en el mercado”. Finalmente, para Romero, “la digitalización es, junto con la sostenibilidad, el otro gran factor de reactivación.
El sector crecerá menos que el PIB
En su intervención, José Antonio Sánchez, director general de ICEA, ha ofrecido sus comentarios y previsiones para el sector en 2022 a los asistentes a la jornada. En primer lugar, Sánchez ha señalado que “el año que viene el sector asegurador crecerá menos que el PIB”, puesto que “no somos demasiado optimistas con la evolución de Vida”.
Para el director general de ICEA el principal riesgo para el sector radica en el estrechamiento de los márgenes, “debido a la menor aportación al resultado técnico de la parte financiera y al previsible incremento de la siniestralidad” tras las fases más críticas de la pandemia. También, en referencia al componente siniestral, ha señalado que el sector ha trasladado en Autos la caída en la siniestralidad a las primas”, de ahí su caída (-0,8%).
Sobre el ramo de Vida, Sánchez ha apuntado que “no se ha recuperado, a pesar de su crecimiento, porque en 2020 las primas de Ahorro cayeron un 20%, además de que cuenta con un componente muy volátil como son las primas únicas”. Así, hasta el tercer trimestre de 2021, la parte de Riesgo creció un 3,5% mientras que la de Ahorro lo hizo en un 9%, “rendimiento que se debe casi en su totalidad al buen comportamiento de los Unit Linked”; en este punto, ha subrayado que “hay que tener en cuenta que el aumento de la inflación ha sido como un torpedo a la línea de flotación para el resto de productos garantizados”.
Las buenas noticias, según ha destacado el director general de ICEA, llegan de los índices de rentabilidad y solvencia (por encima del 200%), “que han podido mantener los niveles pre pandemia”.
Beneficio concentrado en menos entidades
Por ramos, el porcentaje de la aportación de No Vida al resultado técnico del sector se ha situado en el 56,7%. Aquí, José Antonio Sánchez ha puesto de relieve la situación del ramo de seguros Multirriesgos, donde el resultado técnico ha caído casi 6 puntos en los dos últimos años, circunstancia que supone una caída del beneficio técnico en el ramo del 55%, “sobre todo debido a los siniestros de índole meteorológica”.
Asimismo, Sánchez ha afirmado que el beneficio técnico se concentra cada vez más en un menor número de entidades. Aquí, ha puesto de relieve el 10% de las aseguradoras concentra el 60% del beneficio técnico del sector. Si se toman los grupos aseguradores como referencia, la concentración es todavía mayor, escenario en el que los 5 primero grupos acaparan más de la mitad del beneficio técnico del sector. Lo que, según Sánchez, “muestra una tendencia clara hacia la polarización”. Para Sánchez, “el proceso de concentración va ir a más, impulsado por el entorno de bajos tipos de interés que provoca que la parte financiera apenas ofrezca rendimientos a las entidades, por lo que buscan en la concentración la manera de avanzar”.
A continuación, José Antonio Sánchez ha resumido lo que ha ocurrido en la última década. En ese sentido, ha comentado que “el negocio se ha estancado”, destacando por su “heterogeneidad en las primas”. Así, No Vida ha crecido en los últimos 10 años un 20%, impulsado principalmente por Salud, Multirriesgos, Caución y Decesos. Por su parte, Vida ha caído un 11%, lastrado por la parte de Ahorro. Por lo tanto, “las entidades tendrán que buscar el crecimiento de manera inorgánica, puesto que el orgánico no aporta cambios”, según ha señalado Sánchez. Acerca del comportamiento de los Fondos de Inversión y los Fondos de Pensiones, ha resaltado que han crecido más que las provisiones del sector.
En relación con la gestión y la calidad de servicio, el director general de ICEA ha resaltado que “el sector ha hecho los deberes, dando un salto de calidad, ejemplo cumplimiento y calidad de servicio”, además de llevar a cabo “una buena gestión de los márgenes”.
2022: Perspectivas
Sobre el ejercicio 2022 que acaba de comenzar, José Antonio Sánchez ha comentado que está lleno de incertidumbres. Aun así, ha pronosticado que los ramos No Vida crecerán en el entorno del 4 al 4,5%, cuando el PIB lo hará un 5%. En Vida, el entorno seguirá complicado debido a los bajos tipos de interés; circunstancia que podría hacer que los márgenes se estrechasen aún más debido a la todavía menor aportación de las inversiones financieras al beneficio. A lo que hay que unir el más que probable repunte de la siniestralidad. Aquí, Sánchez ha advertido que “no es aconsejable trasladar a las primas las bajadas en la siniestralidad (como ha ocurrido en el ramo de Autos durante la pandemia), ya que cuando está repunte el cliente no lo entenderá”.
Sobre lo que se nos viene encima, el director general de ICEA ve al Covid como un claro acelerador de la demanda aseguradora. Y se ha preguntado si seremos capaces de innovar en la propuesta de valor. En ese sentido, ha afirmado que oportunidades va a haber para quienes se erijan como players del sector, “propiciadas por la mayor demanda aseguradora, los nuevos riesgos que habrá que cubrir, las nuevas necesidades de protección y prevención, así como de las necesidades que presentan el colectivo de personas mayores”. Por ello, según Sánchez, “debemos transformar nuestro modelo de negocio para aprovechar esas oportunidades”. Y “tendremos que elegir, no podremos ser los mejores en todo; incluso tendremos que colaborar con quienes ahora son nuestros competidores”, ha añadido.
Acerca de la omnicanalidad, Sanchez ha señalado que es indiscutible, “pero no puede convertirse en una guerra de canales”. También, sobre los mercados, ha apuntado que “evolucionan, no caen”, por lo que habrá que saber adaptarse a las nuevas circunstancias y tener claro que “ninguna industria será capaz de liderar en solitario un ecosistema económico”.
Experiencia de cliente más importante que la eficiencia
En relación con el cliente, el director general de ICEA ha sido claro: “Hoy por hoy, la experiencia de cliente es más importante que la eficiencia (precio)”. Al respecto ha añadido que “el cliente que se va por precio, volverá por precio. Pero el cliente que se va por una mala experiencia no volverá nunca”.
En referencia al crecimiento, ha insistido que va a ser inorgánico. Pero para ello, según ha advertido, “hay que tener inteligencia de negocio”. En ese sentido, ha puesto de relieve que “en la actualidad el 70% de las redes de distribución solo gestionan el 24% de las primas”.
Por otra parte, sobre los líderes que se necesitan para la transformación, Sánchez ha señalado que tienen que ser flexibles, tener muy en cuenta los márgenes y no esperar a tomar las decisiones con absoluta certeza; es decir, que deben asumir riesgos. Por ello, “los verdaderos players del sector serán los más rápidos en adaptarse a los cambios”, ha subrayado. Además, tendrán que “evitar la posición defensiva permanente, trasladar una cultura de innovación y ser capaces de delegar”.
Por último, el director general de ICEA ha comentado que entre los principales retos para el sector están: “saber retener el talento, trasladar a la sociedad lo que somos y lo que representamos y reinventar nuestro modelo de distribución enfocándolo al asesoramiento”.
El sector crece un 5%
Previa a la intervención de José Antonio Sánchez, la presidenta de Unespa Pilar González de Frutos, ha presentado en la Jornada de Perspectivas de ICEA la evolución de las principales magnitudes del sector asegurador en 2021. Así, ha señalado que el sector ha registrado primas por valor de 61.835 millones de euros, un 5% más. Por lo que, según González de Frutos, el sector “parece haber obtenido en el año 2021 un crecimiento bastante compatible con el comportamiento mostrado por la economía; y esto quiere decir que comparte con ésta la característica principal de situar su facturación, todavía, relevantemente por debajo de los niveles de 2019, concretamente un 3,6%”.
Por ramos, “Vida, como directa consecuencia de su caída brusca en el año 2020, obtienen un crecimiento significativo, del orden del 7,8%, lo cual deja su facturación estimada en este momento en los 23.558 millones de euros. Igual que le ocurría al seguro en su conjunto, este crecimiento, a pesar de ser relevante, todavía sitúa al seguro de vida claramente por debajo del nivel prepandémico, aproximadamente en un 14,41%”, ha señalado González de Frutos. Y ha añadido que “las provisiones de seguros de Vida han mostrado un perfil muy moderado, con una leve expansión del 0,8%, que las ha situado a finales del año 2021 en 195.707 millones de euros. De esta manera, el ahorro gestionado muestra la tendencia al estancamiento que es la tónica del seguro de vida español, presionado en dicha dirección tanto por el entorno de tipos como por los cambios en la fiscalidad”. Para González de Frutos, también “hay que tener en cuenta que en el seguro de Vida hay dos evoluciones dispares, que son las del seguro con cobertura de fallecimiento o seguro de Riesgo, y el seguro de Ahorro. El primero, como se dice coloquialmente, ha mantenido el tipo estos últimos años, y también en 2021, puesto que han crecido un 3,47% lo que lo situaba un 3,1% por encima del nivel de 2019. El seguro de Ahorro, sin embargo, muestra una gran volatilidad y una debilidad que venía observándose antes de la pandemia a causa del entorno de tipos bajos, entorno que ha venido a sumarse con los cambios fiscales. Pese a crecer en primas un 9,14% sigue, aproximadamente, un 18,17% por debajo de esos niveles y, en realidad, bastante más por debajo de los niveles históricos”.
Para No Vida, “se estima que en el año 2021 la facturación ha sido de 38.277 millones de euros, lo que supone un crecimiento aproximado del 3,3%. Los seguros No Vida sí que están por encima del nivel de 2019, aproximadamente en un 4,43% y, por lo tanto, han tenido una evolución más expansiva que la que vemos en los seguros de vida. Pero desigual según los distintos ramos del seguro No Vida”, ha destacado la presidenta de Unespa. Aquí, ha añadido que para Autos “cabe estimar que se ha situado en los 10.990 millones de euros de facturación, importe que representa un descenso del 0,8% respecto del año anterior y que es de 2,85 puntos porcentuales menor que en 2019”. Sobre Salud, ha apuntado que “en el año 2021 estimamos un crecimiento de las primas del 4,9% hasta una cifra de 9.849 millones de euros, lo que confirma la senda de crecimiento sólido de este seguro que, cada vez más, gana un lugar en las preferencias del gasto de las familias españolas”. En relación con el conjunto de seguros Multirriesgos, ha señalado que se trata de “una modalidad de seguro fuertemente golpeada en el año 2021 por los sucesos climáticos, como la tormenta de nieve filomena y las sucesivas inundaciones y Dana que hemos sufrido. las primas de estos seguros patrimoniales han crecido un 4,7% según las estimaciones, puesto que han alcanzado los 8.117 millones de euros, casi ocho puntos porcentuales por encima del nivel del 2019 ya”.
La inflación y el ahorro finalista
Tras ofrecer los resultados del sector en 2021, la presidenta de Unespa ha abordado los que, a su juicio, son los grandes retos que condicionarán el presente y el futuro para el sector. En primer lugar, ha puesto de relieve “que en el momento presente la situación prolongada de tipos bajos sigue siendo la misma. Seguimos encontrándonos en una situación en la que no existe prácticamente margen financiero para poner en marcha esa máquina llamada interés compuesto, que es la gasolina que alimenta el ahorro a largo plazo. Esta situación es tanto más preocupante en tanto que hay un factor macroeconómico que ha variado de una forma muy sustancial en los últimos meses: la inflación”.
Según González de Frutos, “una situación que combina tipos bajos con inflación elevada es la peor de las posibles para el ahorro finalista a largo plazo; que es el ahorro que necesitamos, no en la industria aseguradora, sino en el país entero”. “Lo digo porque es una situación que no viene sino a confirmar los negros presagios que desde la industria del ahorro hacíamos hace semanas o meses en el sentido de que el giro radical en la política del ahorro dictado desde el gobierno podía estar llegando en el peor de los momentos. y así ha sido: ha llegado en el peor de los momentos”, ha añadido. Al respecto, ha comentado que “la nueva política del ahorro por la que ahora se ha decidido apostar se caracteriza por un primer acto de retirada del beneficio fiscal al ahorro individual”. “Esta retirada se realiza a cambio, por así decirlo, de una nueva apuesta: la apuesta por la construcción de un pilar de previsión en las empresas y corporaciones profesionales. Pero esta construcción es, hoy, un proyecto. Tenemos, pues, una realidad, y es que se tapona el ahorro individual; y una posible realidad, que es el eventual desarrollo del ahorro colectivo”.
Según la presidenta de Unespa, “para que este entorno se pudiese corregir, no en beneficio de las aseguradoras ni de los gestores del ahorro, sino en beneficio del país y su bienestar colectivo, haría falta que la promesa de un nuevo pilar de previsión colectivo se concretase tan rápida como intensamente. Sin embargo, eso no va a pasar”. Para González de Frutos, “el plan, tal y como lo conocemos en este momento, no está bien diseñado. El proyecto de gran fondo de pensiones de empleo, tal y como está concebido, se basa en una gran esperanza: el empresario. El empleador es quien tiene que aportar la mayor parte del nuevo ahorro, a pesar de que no se le reservan incentivos para ello. En el ámbito de los trabajadores autónomos, ciertamente se muestra alguna sensibilidad, bastante magra, a través de unos límites de reducción específicos; pero, en general, se acusa cierta falta de sensibilidad hacia el carácter irregular de los ingresos de muchos de estos autónomos”. Para ello, es necesaria la transparencia, pero según ha recordado la titular de Unespa, “en España, sin embargo, todavía estamos esperando a que se cumplan los compromisos en materia de transparencia adquiridos en la reforma del 2011; hace 10 años, pues”.
González de Frutos ha puesto de manifiesto que “el promedio de esfuerzo de ahorro-previsión en los países centrales de la unión europea, calculado sobre la renta disponible de los hogares, es muy superior al español”. Esto quiere decir que “estamos ahorrando menos que los ciudadanos de los países a los que nos queremos parecer, y con los que tenemos que competir”. Y ha insistido que “este es el momento de rectificar, de hacer las cosas bien. Si las hacemos mal, lo pagaremos, y no los aseguradores, sino la sociedad española en general”.
Año complejo en No Vida
En el ámbito del seguro de No Vida, ha continuado González de Frutos, “creo que también nos enfrentamos a un año difícil y complejo”. Sobre Autos, ha apuntado que “se verá afectado por un incremento de las indemnizaciones de daños personales vinculadas, por un lado, a las nuevas bases técnicas que afectará a las indemnizaciones de lucro cesante y de necesidad de ayuda de tercera persona y, por otro lado, al resto de indemnizaciones y gastos que se han visto actualizadas con la tasa de revalorización de las pensiones”.
También habrá que estar atento a todo lo que genera la nueva movilidad urbana, ha señalado la presidenta de Unespa. Y, por último, también en el campo de los seguros de Daños, ha recordado que “tratamos de perfeccionar el sistema español de riesgos extraordinarios, mejorando las definiciones de cobertura del reglamento de riesgos extraordinarios en el ámbito climático e incorporando la cobertura de los daños por lluvias extraordinarias o eventos extremos de nieve como la borrasca Filomena”.