Josep Alfonso (Fundación AXA): «Una posible pandemia ya figuraba en el ‘top ten’ de riesgos emergentes»
Josep Alfonso, director general dela Fundación AXA, ha señalado que la posibilidad de que se produjera una pandemia como la que ahora nos afecta ya estaba contemplada por los expertos. De hecho,afirma que, en un informe de AXA sobre riesgos emergentes publicado a finales de 2019, en el que participaron expertos internacionales, «el riesgo de pandemia ya se situaba en la octava posición entre los riesgos emergentes«. No obstante, apunta que era un riesgo que señalaban principalmente los especialistas africanos, que ya habían vivido situaciones graves con las epidemias del ébola o el zika; «lo que nadie preveía era que el foco se situara en Asia».
Para Alfonso, la situación creada por la crisis sanitaria del coronavirus ha tenido y tendrá un importante impacto emocional en los ciudadanos: «Ha alterado de forma absoluta nuestra forma de vida y nos ha puesto en una situación sin precedentes, con consecuencias como la pérdida del empleo, el aislamiento, la incertidumbre… Son grandes cambios y eso nos debe llevar a hablar también de desescalada emocional». En este sentido, apunta la colaboración de Fundación AXA con la organización colegial de psicólogos, con quien han elaborado, entre otros proyectos, un decálogo sobre el insomnio y otro para familias que conviven con personas mayores.
Estas son algunas de las afirmaciones que Josep Alfonso ha hecho en el encuentro digital ‘La vida en España en tiempos de Covid-19. Apuntes para la desescalada emocional‘, organizado por Europa Press. En el mismo encuentro, José Antonio Lorente, catedrático de Medicina Legal en la Universidad de Granada y presidente de la Fundación QSD Global, ha puesto de relieve que «nadie podía imaginar que, en pleno siglo XXI, el mundo se podía parar totalmente por una pandemia; esto tiene un impacto emocional y sobre la salud enorme. Va a tener repercusiones piscológicas muy importantes que, de no controlarse adecuadamente, generarán nuevas psicopatologías que, a su vez, pueden derivar en repercusiones físicas sobre el organismo». Afirma que, «ahora que se empieza a ver la luz al final del túnel, es el momento de tomar medidas, tanto en lo que se refiere a tratamientos como a actuaciones en el ámbito social».